No te puedes perder “Interstellar”
Sumario:
Si te gusta la ciencia ficción debes ya haber visto la obra maestra de Christopher Nolan, «Interstellar», estrenada el pasado 7 de noviembre. En este post apuntaré los puntos fuertes de la película, así como los fallos que tiene, incluidos los relativos a la radioprotección, por supuesto, ya que éste es un blog de física médica. […]
Si te gusta la ciencia ficción debes ya haber visto la obra maestra de Christopher Nolan, «Interstellar», estrenada el pasado 7 de noviembre. En este post apuntaré los puntos fuertes de la película, así como los fallos que tiene, incluidos los relativos a la radioprotección, por supuesto, ya que éste es un blog de física médica.
Es complicado hacer una crítica científica a la película sin spoilearla a muerte, así que llegado el momento justo, avisaré para que quien no la haya visto y quiera llegar virgen al cine -jejejejeje- pueda dejar de leer.
Vistazo general
En un futuro distópico, la humanidad se ve obligada a levantar los ojos al cielo para buscar un nuevo hogar. Una señal se detecta cerca de Saturno, hay que arriesgarse y mudarnos a otro planeta. Probablemente es la mejor película de Sci-Fi desde «2001: una odisea en el espacio”. Christopher Nolan, que ha confesado en repetidas ocasiones su admiración por Stanley Kubrick, ha creado una auténtica obra maestra de ficción espacial vestida de ciencia: agujeros de gusano, agujeros negros, viajes temporales y la quinta dimensión. Hay algo que recuerda a Asimov, a Phillip K. Dick o incluso a Verne en toda la trama de “Interstellar”. Todo un culto geek. Descarnada. 169 minutos.
La película está grabada en los 70 mm con los que trabaja IMAX en lugar de los 35 mm convencionales. Así que olvida el 3D, la mejor manera de ver “Interstellar” es en 70 mm.
Crítica científica (¡¡ Atención spoiler !!)
A estas alturas me he encontrado que hay ríos de Mb de posts que analizan esto mismo. Así que sin ánimo de pretender hacer un copy & paste, cito tres que me han sido de gran utilidad, dos de Naukas, el de Francis Villatoro y el de Arturo Quirantes, y el de elconfidencial.com.
El gráfico elaborado por el diseñador Dogan Can Gundoglu, es perfecto para entender toda la trama temporal, aunque hay algún error, como que el agujero negro que se indica al comienzo es en realidad un agujero de gusano y que Gargantúa, aunque no lo indica, es el agujero negro.
Este otro gráfico, publicado en Reddit, aunque es bastante más complejo y no tan claro, añade más información (dale zoom a tope para leer los detalles).
El rigor científico de «Interstellar» recae en el trabajo del físico teórico Kip Thorne, asociado con la productora Lynda Obst, que ya habían colaborado en la también muy solemne «Contact», basada en la obra del famosísimo divulgador científico Carl Sagan (de hecho, fue el propio Sagan el que presentó a Thorne y Obst según dicen… en una cita a ciegas).
El grueso de la labor de Kip Thorne en «Interstellar» se centró en traducir a imágenes comprensibles (y atractivas, dentro de lo posible) los agujeros de gusano y los agujeros negros, dos elementos básicos en el viaje espacial que emprenden los protagonistas. Para mostrarlos definió las ecuaciones que permitirían seguir los rayos de luz según rodean a un agujero negro o entran en un agujero de gusano. Por tanto, lo que aparece en la película está basado en la Teoría de la Relatividad de Einstein. Esas ecuaciones dieron como fruto la programación de un software de CGI completamente nuevo que podía interpretar los complejos cálculos de Thorne acerca del comportamiento de la luz. El resultado: algunos planos tardaban más de cien horas en ser renderizados.
Puntos fuertes de la película
1. La visualización del agujero negro. El agujero negro llamado Gargantúa es el centro del sistema en el que se encuentran tres planetas en los que podría haber vida. Aunque no se sabe exactamente qué aspecto tiene un agujero negro, la representación de la pelicula tiene en cuenta un aspecto fundamental, que son las distorsiones del espacio tiempo que causa en la luz un agujero negro. En la mayoría de las representaciones de este fenómeno las simplifican con un disco de gas brillante en torno a una bola negra. Se obvia el hecho de que la luz no pasa de no poder salir del agujero a comportarse normalmente, sino que es desviada por la gravedad y crea efectos visuales curiosos.
2. La forma del agujero de gusano. El resultado, tras todos los cálculos de Thorne, es estéticamente brillante: una especie de agujero (¡esfera!) de cristal que refleja (¡y se traga!) todo el universo.
3. Las distorsiones temporales. El primero de los planetas (planeta de Miller) que los protagonistas visitan en la búsqueda de un sustituto para la Tierra sufre de una intensa dilatación temporal: el tiempo pasa allí a otra velocidad, de forma que una hora en su superficie es como siete años aquí, en la Tierra. La dilatación del tiempo es un fenómeno relativista conocido, y no sólo tiene lugar a velocidades cercanas a la de la luz sino también en campos gravitatorios extremos.
4. Los viajes a través del espacio. Hay varios aspectos de las travesías espaciales que realizan los protagonistas que han dejado satisfechos a muchos expertos y aficionados a la astrofísica.
Por un lado, el silencio. Como decía el claim de Alien, «en el espacio nadie te oye gritar». El sonido no se propaga en el espacio, como se han hartado de repetir muchos tras años de explosiones, disparos y naves zumbando de un lado a otro. En “Interstellar”, no hay nada de todo esto.
Por otro, los cálculos de las distancias son razonables (18 meses para llegar a Marte y dos años más hasta Saturno) y similares a los empleados por las sondas Voyager. También es acertado el uso de Marte para usar su tirón gravitatorio y ayudarse en el trayecto.
Y por último, la forma de la estación espacial Endurance, redonda, y el hecho de que gire para generar una gravedad artificial que permita a los viajeros cierta sensación de normalidad. La exploración del espacio sideral que propone «Interstellar» está, en todo momento, basado en lo que sabemos (más o menos), aunque el guiño a «2001, una Odisea en el Espacio» es muy explícito.
5. Los «datos cuánticos». La búsqueda de un planeta habitable es sólo uno de los dos planes para salvar a la humanidad. El otro depende de los científicos en la Tierra, que deben resolver «las ecuaciones» y para ello necesitan recopilar una serie de «datos cuánticos» observables sólo desde dentro del agujero negro. Aunque resulta inverosímil que un equipo de físicos teóricos esté sólo compuesto por dos personas, y no haya ninguna referencia a los archimencionadísimos equipos multidisciplinares, es difícil evaluar este punto. Sabemos que la Teoría de la Relatividad y la Mecánica Cuántica funcionan muy bien por separado, pero no hay forma de enlazarlas. Hoy en día no hay una Teoría Unificada , pero si la hubiese en un futuro, tal vez algún físico experimental encontrase la forma de generar un agujero negro (que ya es posible en el CERN, pero se evaporan muy rápido) y poder medir «algo» in situ que contraste la teoría.
6. La estación espacial Cooper. Al final de la película el prota aparece en una estación espacial bautizada con su apellido. Se trata de un cilindro de O’Neill, una nave teórica que se planteó por primera en los ’70 por el físico de universidad de Priceton, Gerard K. O’Neill. En dicha estación se recrea gravedad artificial, atmósfera, cultivos agrícolas y un ecosistema. Aunque sale poco, apenas dos planos cortos en perspectiva del interior , se puede decir que han seguido las directrices teóricas actuales.
Puntos débiles de la película
1. Los efectos del agujero negro. El principal fallo de la película es pensar que un planeta que está tan cerca del agujero negro pueda ser habitable. A esa distancia, debería encontrarse cerca del disco de acreción, el anillo de materia que gira alrededor del agujero y lo alimenta de materia. Incluso si girase en una órbita inclinada, atravesaría ese disco dos veces en cada órbita, con lo que sería bombardeado por esa materia moviéndose a altísimas velocidades.
Además, a esa distancia estaría dentro del alcance de enormes cantidades de radiación X y radiación gamma, lo que lo harían un mal candidato para acoger vida. Por no hablar de que las fuerzas de marea forzarían al planeta a presentar siempre la misma cara al agujero negro, igual que ocurre con la Luna respecto a la Tierra. De forma que en una mitad sería noche perpetua y en la otra, un día eterno. Ambos lados del planeta estarían sometidos a distintos grados de atracción gravitatoria, y si la diferencia es demasiado grande, éste podría incluso destruirse.
2. Incoherencias astrofísicas. Con el fin de generar espectacularidad o por descuidos, hay más detalles de la película que le chirrían a un espectador crítico. Por ejemplo, las descomunales olas del primer planeta, cuando el océano sobre el que aterrizan apenas tiene dos palmos de profundidad. ¿De dónde sale todo ese agua? Y además, si las nubes se congelan y solidifican, ¿por qué siguen sosteniéndose en el aire?
Por otra parte, si los planetas visitados tienen el agujero negro Gargantúa como centro de su sistema y no una estrella, ¿de dónde sale la luz y el calor que los baña? No estoy seguro si se explica, pero tal vez cada uno de los esos planetas orbita alrededor de una estrella, los cuales también giran alrededor de Gargantúa.
3. Escapar del campo gravitatorio. Las pequeñas naves Ranger plantean dudas, pues tienen la potencia para escapar del campo gravitacional de los planetas, pero, ¿dónde llevan la enorme cantidad de combustible necesario para alcanzar esa potencia? ¿O es que cuentan con una fuente de energía más eficaz? Si es así, ¿por qué el despegue desde tierra se hace con la propulsión de lo que parece un cohete o un transbordador como los actuales?. Tal vez por ahorro de combustible, pero eso no queda claro en la película.
4. Asomándose al horizonte. Hay un momento en el que uno de los protagonistas no se asoma, sino que cruza el horizonte de sucesos y se adentra en el agujero negro. Esto no puede considerarse propiamente un error, sino más bien una licencia que sirve únicamente al propósito de la historia y que no tiene ninguna base real, puesto que sería imposible de cualquier manera sobrevivir. No obstante, ¿cómo explicar qué es un ser de 5 dimensiones? ¿Cómo ilustrar la interacción de la gravedad con nuestro conocido espacio-tiempo? Pues así, asomándose al horizonte.
5. Radioprotección. Como en todas las películas de ciencia ficción, se obvia el hecho de que el cosmos está invadido por la radiación, la cual podría ser letal para la vida. Por ejemplo, ya sólo el viaje desde la Tierra a Saturno sería inviable, pero este hecho se podría salvar en la película. Los astronautas de “Interstellar” tienen la posibilidad de hibernar mientras van en la nave, de tal modo que su cuerpo queda “congelado”, pudiendo retomar su curso de vida normal una vez “despertados”. Para tal fin se introducen en una especie de sarcófago, el cual podría estar blindado adecuadamente. Bueno, hasta ahí, vale. Pero cuando se encuentran en las proximidades de Gargantua, ahí no hay bicho viviente que sobreviva, a no ser que supieras moverte entre 5 dimensiones ☺.
En definitiva, «Interstellar» tiene sus claroscuros desde el punto de vista científico, algo de esperar puesto que al fin y al cabo es una obra de ficción. El propio Nolan ha salido al paso, defendiéndose de las críticas en este sentido: «Una buena parte es, por supuesto, especulación», admite. «Sé dónde engañamos, de la forma que tienes que engañar en el cine, y me encargué de que Kip (Thorne) estuviera al tanto».
Nota: Para los amantes de la bandas sonoras (¡me encanta la de la película!), recordad, Hans Zimmer es otro colaborador habitual de Nolan. Suyas son las bandas sonoras de las tres películas de «Batman» y de «Inception». La banda sonora completa estará a la venta ya mañana 18 de noviembre y puede adquirirse en precompra en iTunes.